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¿En qué estoy? Eso es lo que
algunos lectores y seguidores me preguntan cuando pasan semanas sin que
publique nada en redes sociales. Así que usaré esta entrada para contarles qué
estoy haciendo y qué se viene en el futuro próximo.
Como muchos saben, escribir es
una afición que pasó a ser un segundo trabajo, pero que no es mi actividad
principal, por mucho que desearía que así fuera. Y, el que es mi trabajo
principal, ha demandado bastante tiempo durante los dos últimos meses, por lo
que escribir se ha vuelto complicado. Sobre todo, por unos inesperados asuntos
familiares que tal vez en otro momento les cuente con mayor detalle.
De todas maneras, algo grande se
acerca: mi primer trabajo con una editorial de verdad, confiable y muy, pero
muy recomendada para los amantes de la ciencia ficción, ya sean lectores o
escritores.
Antes de hablar de eso, les voy a
contar sobre mis otros proyectos, para que entiendan que, a pesar del poco
tiempo que he tenido para escribir, no he dejado de trabajar en ellos. De este
modo, les cuento que la tercera parte y final de Réquiem de los Cielos está en
proceso. Ya tengo el primer borrador, pero no ha terminado de convencerme y estoy
revisándolo casi con microscopio, porque, una saga de esa magnitud, con el
éxito y la aceptación que ha tenido ―considerando que se trata de una obra
autopublicada―, merece un buen cierre y no un final forzado y que deje un mal
sabor de boca. Aunque, debo admitirlo, la idea que tengo para terminar con las aventuras
del Demonio de la Lujuria puede que no sean del todo aceptadas y comprendidas
por quienes esperan conocer el desenlace de esta historia, pero lo que me importa
en realidad es el mensaje oculto entre sus capítulos y la visión que intento
plasmar sobre la religión y la espiritualidad.
Para los que están esperando la
continuación de Sumer, debo decir que este trabajo ha sido un poco más lento de
lo que había esperado. Después del final de la primera parte, he descubierto
muchos otros datos que puedo utilizar, ya sean históricos, científicos,
pseudocientíficos o meras leyendas urbanas. En fin, tanta información ha sido
difícil de procesar y prefiero tomármelo con calma para mantener el hilo
argumental del viaje que llevará al sargento Poblete a un destino fascinante,
mucho más allá de las estrellas.
El otro proyecto que tengo en marcha
es el que me significó adjudicarme el Fondo del Libro año 2020, Xalpen, una
historia de terror basada en la mitología Selknam, aunque con una
interpretación bastante libre de su ritual más importante, el Hain. Creo que
esta novela va por buen camino, avanzando a buen ritmo y buscando la atmósfera de
terror que tuve en mente desde un principio, a la vez de mostrar a mi querido
Punta Arenas como la hermosa ciudad que es.
También está en marcha Fénix, la
tercera parte de la serie Amor Inmortal, en la que Laura Torneiro me invitó a
participar hace unos años. La que será la continuación de Valquiria y Quimera apenas
tiene un par de capítulos escritos, pero la idea lleva en desarrollo bastante
tiempo. No sé cómo se las ingenia Laura, pero ella ya tiene un nuevo capítulo
de Crónicas de Días Pasados, una precuela a la historia principal, y muchas
nuevas ideas para lo que será esta parte de la historia de Beca y Andreus que puede
o no ser el final de toda su aventura, pues es una novela tan cautivante que no
estamos seguros de cuándo llegaremos a su final. Sobre todo, después de sufrir
un pequeño traspié en la edición de Valquiria que en nada cambió las buenas
críticas que hasta ahora ha recibido.
Y así llego a lo más próximo,
algo que ya tiene fecha, hora y título. Se trata de Venganza – Astrea, la que
será lanzada el próximo 17 de octubre vía Facebook por Sietch Ediciones, una tremenda
editorial independiente dirigida por el premiado escritor de ciencia ficción
Michel Deb y un monumental equipo en el que tengo que destacar a la editora en
jefe, Jean Véliz, al director audiovisual, Jorge Zavala, y al genial Claudio Pizarro por el diseño de la portada. Esta novela,
pensada de forma original como cómic, fue todo un desafío para mí y me tiene
bastante satisfecho. Nació de una simple conversación entre amigos, con la
compañía de un café, y creció hasta convertirse en lo que es, la historia de
una actriz que se lanzará en cuerpo y alma a su cruzada por castigar lo que la
justicia se ve impedida de sancionar. Además, el proceso editorial fue algo
totalmente nuevo y gratificante pare mí. Como autor autopublicado, descansar en
el profesionalismo de la gente de Sietch y ver los espectaculares resultados de
su trabajo, ha sido una experiencia genial, llena de sorpresas y alegrías. No
saben lo ansioso que me encuentro de ver el resultado final y poder anunciar la
que será mi cuarta novela.
En fin, eso es lo más cercano. Para
el futuro hay muchas cosas más. Verme involucrado con gente que vive y respira
ciencia ficción me ha inspirado y a las obras que estoy escribiendo en este
momento debo sumar una caótica y gigantesca nueva novela que mezclará elementos
propios de la fantasía y la ciencia ficción. Sin ser un gran conocedor de este
género relativamente nuevo para mí, puedo decirles que será algo así como una
mezcla entre El Señor de los Anillos y Star Wars, aunque bajo mi propio punto de
vista.
Así que, amigos y amigas
mundiales, les pido que me tengan paciencia y sigan atentos para que no se
pierdan detalle alguno de los trabajos que se vienen. Hay muchas noticias a la
vuelta de la esquina.
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